La esperanza y las esperanzas

Landsberg, con verdadera finura fenomenológica, distingue entre la esperanza y las esperanzas, y muchas veces el derrumbe de éstas últimas puede conducir, tras un verdadero proceso de purificación, a hacer posible la esperanza en singular. Es digno de estudiar la relación dialéctica que se establece entre la esperanza y las esperanzas. Se podría decir que la verdadera esperanza sólo se desarrolla y yergue su cabeza en el momento en que las esperanzas en plural se desvanecen definitivamente y se despojan de sus espejuelos. La desilusión y el desengaño juegan un papel positivo mientras no se clausuren en sí mismas. Sólo así puede abrirse a la esperanza en singular y permitir que ésta germine y arraigue. A través del desengaño se da una purificación de la esperanza; la caída de las esperanzas ilusorias puede permitir que brille la auténtica esperanza. El artículo junto a Paul Landsberg, también considera los aportes de Gabriel Marcel, Ernst Block y Joseph Pieper.